La alimentación saludable en el trabajo es ya una necesidad que las organizaciones no deben obviar. Aunque las principales comidas no se realicen en la oficina, las empresas deben promover una correcta alimentación a sus trabajadores. Además de incentivar a que hagan ejercicio, no fumen o descansen lo suficiente. Sigue leyendo y descubre por qué debes incorporarlo en tu empresa.
Una alimentación saludable en el trabajo comporta una serie de beneficios que pueden repercutir positivamente en los trabajadores. El beneficio, además, repercutirá tanto en su salud como en su desempeño en el trabajo. Llevar una alimentación equilibrada hace que aumente nuestra vitalidad, mejora nuestra atención y nos ayuda a prevenir enfermedades crónicas. Sin embargo, este hábito también beneficia a las empresas. Una buena alimentación hace que se reduzca el absentismo laboral y los errores en el trabajo. Además, mejora el rendimiento de los trabajadores y produce una mayor productividad. De ahí la importancia en crear entornos saludables que faciliten a los empleados información y pautas de alimentación.
Gran parte de nuestros hábitos los hemos adquirido a lo largo de nuestra infancia. No obstante, los datos que nos aporta el sector hacen que exista una gran necesidad de educación alimentaria. Según la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad Estatal de Londres, menos del 20% de la población consume frutas, verduras y legumbres tres veces a la semana.
Una persona mal alimentada irá perdiendo, poco a poco, su capacidad de trabajo. Por eso, las empresas tienen la oportunidad y la necesidad de fomentar hábitos saludables para cambiar su alimentación. En Turijobs te ofrecemos unos consejos prácticos para que fomentes una alimentación saludable en el trabajo entre tu equipo:
Además, las empresas pueden ayudar a implementar estas prácticas. Éstas pueden (y deberían) incluir neveras en la oficina para fomentar el uso de tuppers y comidas no envasadas. Otra buena idea es implementar maquinas expendedores con alimentos saludables (fruta, yogur o ensaladas). O incluso desayunos saludables a disposición de los empleados.
Ten en cuenta que el tipo de trabajo a realizar por los empleados también puede influir en la alimentación. Los empleos sedentarios, como los trabajos de oficina o de transporte, no necesitarán un extra de alimentos. Esto es porque el trabajo que realizan no requiere de un gasto excesivo de calorías. Sin embargo, los trabajos de mayor movimiento, como guías turísticos o personal de mantenimiento, necesitarán una cantidad extra de calorías. El motivo es para compensar su actividad y el desgaste de energía que provoca. No olvidemos los trabajos con horarios especiales, como tripulantes de cabina, o de alto cargo de trabajo, como los empresarios y directivos. El desgaste psíquico que provoca estos trabajos ambién debe ser compensado.
Según un informe de la OMS, una alimentación adecuada y la práctica de actividad física en trabajadores pueden incrementar los niveles de productividad en un 20%. Aplica la Salud Corporativa y conoce sus beneficios en este post.
Para promover la difusión, el INSHT (Instituto Nacional de Seguridad, Salud y Bienestar en el trabajo) pone a la disposición de las empresas materiales divulgativos para facilitar esta práctica. Utilízala y apuesta por el bienestar, la vitalidad y la productividad.